19 de diciembre de 2001, Buenos Aires, Argentina
Q.S.V.T.
Fue gestándose lentamente
en los intestinos del barrio
de la escuela
de la fábrica
Se implantó en el útero del colectivo
con el sudor de los hartazgos
y sus hambres de cambio
en los intestinos del barrio
de la escuela
de la fábrica
Se implantó en el útero del colectivo
con el sudor de los hartazgos
y sus hambres de cambio
Maduró y tomó la forma de sus progenitores:
- orejas de taxista y peluquero
- ojos de quiosquero y canillita
- canas de abuela de plaza, y de paloma
- nariz de cocinera de restorán de la esquina
- voz de pintor de grafitis y de maestra de escuela
- piernas de cadete y camarera
- manos de obrero y de artista
Engordó
hasta que las broncas desbordaron los pulmones
- orejas de taxista y peluquero
- ojos de quiosquero y canillita
- canas de abuela de plaza, y de paloma
- nariz de cocinera de restorán de la esquina
- voz de pintor de grafitis y de maestra de escuela
- piernas de cadete y camarera
- manos de obrero y de artista
Engordó
hasta que las broncas desbordaron los pulmones
y en la euforia le pusimos un nombre
y exhalamos en un grito su alumbramiento...
11 comentarios:
Este texto lo escribí poco después de salir aquel 19 de diciembre de 2001.
Se que no es un buen texto, y que tal vez sea demasiado directo y hasta pancartista. Hoy no escribiría algo así.
Pero lo leo y me vienen las lágrimas de emoción de aquella jornada en la que fuimos todos uno.
Y por eso quería regalárselos.
No nos olvidemos que una vez pudimos.
(Este texto fue publicado en cruzagramas el 19 de diciemnbre de 2007.
Un grito que hoy nos encuentra de nuevo
En las plazas
En las calles
En un alarido que nos muestra que siete años después
Todavía sabemos
Que el futuro está en nuestras manos.
Muy bello texto, Zaiper!
Arriba los que luchan!
Crisálida
Recuerdo muy bien el momento: mi sobrina nació el 27 de diciembre del 2001, y mi hermana menor se quedó sin el buen trabajo que tenía, con dos hijos chicos y montones de obligaciones... Familiares, amigos, desconocidos por un lado, sufriendo el robo de sus ahorros, el hambre, el desamparo, la impotencia.
Y como el hada que dicen que llega al mundo cada vez que un bebé sonríe, por otro lado, llegaban la ayuda, la solidaridad, la unión, la fuerza para hacerse escuchar y el agradecimiento.
Eso es lo que no tiene que perderse.
Si, eso que decis Sebas "fuimos todos uno"nos ha pasado muchas veces a los argentinos. Aunque siempre trato de que el arbol no me impida ver el bosque.
Atras, en el bosque, a veces hay que detenerse a observar a los actores participantes y comprender que intereses los mueven y tener bien en claro quienes ponen el arbol para que no veamos el bosque. Independientemente de lo que "nos hacen" los politicos creo que somos un pueblo en donde nadie cede un poco en funcion del resto: somos muy individualistas.
Y los politicos son emergentes de NUESTRA sociedad, no vienen de otro planeta.
Digo ¿no tendriamos que pensar que, al menos, una parte de nuestros problemas tiene que ver con nuestra idiosincrasia?
Me gusto tu texto y no me parece de pancarta o panfleto.
Me encanto lo de la forma de los progenitores ¡Y los progenitores!
Te mando dos besos: uno en cada mejilla.
Los anónimos son quienes hacen los cambios reales, aunque a veces, tarden en notarse. Saludos.
Bien por los anónimos, por ellos se forja un pais.
Paso a saludarte por estas fiestas deseandote que lo pases genial y que el año entrante nos encuentre unidos.
Besosssssss.
- Si una vez pudimos, pero después nos quedamos sin ganas, ojala podramos otra vez, sólo depende de recuperar las ganas y entender que somos todos patria y tenemos derecho a que no se nos mienta tanto, yo no quiero ni una heladera ni un auto, solo el acceso a la educación hace a La Patria grande y crea la esperanza. Bsos, Ade
"Orejas de taxista y...;ojos de kiosquero...;canas de abuela de plaza...nariz de cocinera..." y demás configuraciones del rostro polifacetico de anónimos en multitud, me hacen revivir aquellos impulsos reactivos y espasmódicos de mi pueblo y que a traves de tu poesía Sebastian, me llegan como ecos de un pasado muy cercano pero que nos late como un corazón enfermo. Para mi parecer,la expresión a traves del arte transciende los parametros de las calificaciones, porque la libertad que fluye a traves del espíritu es simplemente eso...¡¡¡LIBERTAD SIN CALIFICATIVOS !!!.Un abrazo. Lalo Barraza
Con este me emocioné, me encantó, te lo dije. ¿Me querés hacer llorar?
fue así
No nos une el amor, sino el espanto...
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